París, misterio y rock and roll: la policía francesa anunció el hallazgo del busto de Jim Morrison, robado en 1988 de su tumba en el cementerio Père-Lachaise. La escultura apareció por accidente durante un operativo por fraude económico y reabre el enigma en torno a uno de los íconos más legendarios del rock.
La pieza, tallada en mármol blanco por el escultor croata Mladen Mikulin en 1981, había sido colocada en la tumba del líder de The Doors una década después de su muerte. Desde entonces, se convirtió en un símbolo de peregrinación para fans, que dejaban flores, velas o poemas. También fue objeto de vandalismo y culto: su nariz fue mutilada por coleccionistas y grafitis cubrían su superficie.
🎤 Jim Morrison, fallecido en París en 1971 a los 27 años, sigue envuelto en leyendas. Su muerte —atribuida a un paro cardíaco, aunque cargada de versiones alternativas— fue apenas el comienzo de un mito que se expandió con los años. El robo del busto en 1988 lo volvió casi una reliquia maldita para melómanos y saqueadores.
💀 Aunque todavía no se informó si el busto volverá a su lugar original en Père-Lachaise, el hallazgo inesperado revive el interés por el culto que rodea al “Rey Lagarto”. A 53 años de su partida, su tumba —incluso vacía— nunca dejó de ser un altar para los espíritus del rock.