
Investigadores avanzan en interfaces cerebro-computadora (BCI), un sistema que conecta el cerebro con dispositivos electrónicos y permite interpretarlos directamente. Con electrodos en el cuero cabelludo, estas herramientas pueden traducir la actividad cerebral en comandos reales, lo que abre nuevas fronteras tecnológicas.
👉 ¿Qué permite esta tecnología?
- Que personas con movilidad reducida puedan comunicarse y operar tecnología solo con su mente.
- Crear videojuegos controlados por pensamientos, sumergiendo al usuario en una experiencia nunca antes vista.
Pero junto a este progreso, también llegan los desafíos: ¿qué pasa con la privacidad mental? La posibilidad de acceder a pensamientos genera debates éticos urgentes sobre el consentimiento y el uso responsable de esta información.
Lo que parecía ciencia ficción ahora es ciencia real. Las BCI prometen transformar industrias enteras y acercarnos a un futuro donde humanos y máquinas estén más conectados que nunca. 🤖