Se terminó la tregua soleada: el cielo amenaza con chaparrones nada menos que durante la noche del sábado. Las temperaturas, lejos de ser extremas, irán de los 12 a los 22 grados, pero la humedad y el viento jugarán su partido.
El domingo no pinta tan tremendo: sube un poco el calor —esperan hasta 22 grados—, aunque el cielo seguirá encapotado sin lluvias declaradas. Para el lunes, algo más de lo mismo: nublado por la mañana, cielo parcialmente escondido en el resto del día y casi nula chance de tormentas.
En paralelo, en provincias como La Pampa, San Luis y sur de La Rioja, se emitió una alerta amarilla por vientos fuertes —ráfagas de hasta 75 km/h que podrían desordenar lo que se cruce: techos livianos, objetos sueltos, sombras voladoras.
Prepárate: paraguas siempre a mano, ropa de abrigo ligera, y paciencia para bancar los días grises.