
Foto: NASA
Gracias a sus potentes observaciones, el telescopio espacial James Webb logró reconstruir cómo evolucionaron las galaxias espirales como la nuestra ✨.
Un equipo internacional estudió 111 galaxias lejanas y concluyó que primero aparece un disco grueso de estrellas viejas, y luego se forma un disco delgado con estrellas jóvenes. Esta estructura también se observa en la Vía Láctea, que tiene un disco grueso de 3000 años luz y uno delgado de 1000.
🔭 El hallazgo, posible gracias a la resolución sin precedentes del JWST, permite mirar al pasado y entender cómo se organizó la materia en el cosmos. La clave: observar galaxias lejanas como si fueran cápsulas del tiempo.
“El telescopio Webb nos permitió ver estructuras que antes eran invisibles”, señalaron los investigadores. La información podría ayudar a afinar los modelos actuales de evolución galáctica. 💫