En la costa noreste de Brasil, un fenómeno natural conocido como el Camino de Moisés permite a los visitantes caminar literalmente en medio del mar durante un breve período cada día. Se trata de un banco de arena de aproximadamente un kilómetro que emerge durante la marea baja en la Playa de Barra Grande, en el estado de Alagoas, y que se ha convertido en una de las atracciones turísticas más singulares de la región.
El nombre hace referencia al pasaje bíblico en el que Moisés divide las aguas del Mar Rojo para que el pueblo hebreo pueda cruzar. En este caso, el fenómeno ocurre cuando la marea alcanza su punto más bajo, revelando una franja de arena que permite atravesar el mar a pie. La experiencia es gratuita, no requiere excursiones organizadas ni pago de entradas, y puede vivirse a solo seis kilómetros del centro de Maragogi, cerca del límite con el estado de Pernambuco.
La clave para disfrutar del Camino de Moisés es la precisión: según las tablas de mareas disponibles hasta finales de 2025, los mejores momentos ocurren solo algunos días al mes, cuando el nivel del mar desciende a 0.1 o 0.2 metros. Fuera de ese intervalo, el banco de arena permanece completamente sumergido.
Este fenómeno no solo atrae por su rareza, sino también por su valor simbólico y visual. Cada año, miles de personas lo visitan en busca de una experiencia fuera de lo común, que combina naturaleza, espiritualidad y una postal impactante. Sin embargo, quienes no planifican bien su visita corren el riesgo de perderse este espectáculo breve y fascinante.