
Brasil volvió a quedar fuera del mapa del hambre de la ONU, logro que el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva consideró un hito y una promesa cumplida. El país había reingresado a ese listado en 2021, durante el mandato de Jair Bolsonaro, en medio del impacto de la pandemia y el desmantelamiento de políticas sociales.
💬 “Con gran orgullo informo: Brasil está fuera del mapa del hambre, una vez más”, expresó Lula en redes sociales. En una llamada con el director de la FAO, Qu Dongyu, agregó: “Es una misión de vida, una profesión de fe. Hoy dormiré con la conciencia tranquila”.
El anuncio se apoyó en el último informe de la ONU sobre seguridad alimentaria, presentado en Adís Abeba. El estudio indica que entre 2022 y 2024, menos del 2,5 % de la población brasileña estuvo en riesgo de subnutrición, condición para salir del listado. 🟢
🔧 Las claves del avance incluyen el aumento del salario mínimo, el refuerzo a la agricultura familiar, la mejora en la alimentación escolar y el acceso a comida saludable, todo impulsado por el plan “Brasil Sin Hambre”.
El ministro de Desarrollo Social, Wellington Dias, destacó que el objetivo se alcanzó dos años antes de lo prometido y remarcó que la lucha contra el hambre debe articularse con la agenda climática. En esa línea, Brasil lanzará nuevas políticas que integren sistemas alimentarios sostenibles y cambio climático.
🌍 El país será sede de la COP30 en 2025, en la ciudad amazónica de Belém. Allí se buscará conectar las agendas social, climática y alimentaria en una declaración conjunta de líderes. “No puede haber una transición justa sin transformar los sistemas alimentarios”, sentenció Dias.