Capcom volvió a encender la polémica y dejó a miles de fans mirando al techo: confirmó que Resident Evil Requiem no tendrá demo. Sí, así como suena. En plena era de pruebas anticipadas y campañas de hype, la empresa decidió cerrar la puerta y pedir “confianza ciega” mientras promete un juego “de máxima calidad”. Una jugada arriesgada que, para muchos, huele más a improvisación que a estrategia.
Masato Kumazawa, productor del título, aseguró que “no hay planes, ninguno en absoluto” de lanzar una demo. Según Capcom, el objetivo es enfocarse solo en el producto final, que debería aterrizar el 27 de febrero de 2026. Una explicación que no convence del todo a los jugadores, acostumbrados a probar antes de pagar y que recuerdan demos históricas como las de Village o Biohazard.
La decisión llega en un clima de sospechas: algunos temen que el estudio esconda problemas de rendimiento, aunque Capcom jura que esta vez no repetirá los errores de Monster Hunter Wilds en PC. La compañía insiste en que quiere un lanzamiento “pulido al máximo”, pero no todos compran el discurso.
Para colmo, Requiem trae conexión directa con Resident Evil Outbreak, pero Capcom promete que no hará falta conocer nada para seguir la historia de Grace Ashcroft, hija de una víctima del desastre de Raccoon City. Aseguran que será accesible para todos. Algo es algo.
La ausencia de demo divide a la comunidad, inquieta y alerta. Y mientras Capcom pide paciencia, los fans piden transparencia. La pregunta en el aire es la misma: ¿hay confianza… o hay algo que no quieren mostrar?