Un acuerdo oculto que ya impone reglas
El Gobierno de Javier Milei acelera cambios legales para cumplir con un acuerdo comercial con Estados Unidos que aún no se mostró. No hay texto final, no hay debate y no hay transparencia. Aun así, la Casa Rosada actúa como si el pacto estuviera firmado.
Exigencias que llegan desde Washington
Funcionarios argentinos regresaron de Estados Unidos con una lista de pedidos. Entre ellos, eliminar impuestos, borrar controles y aceptar estándares norteamericanos sin revisar nada en el país. El Gobierno parece más preocupado por complacer a Washington que por defender intereses locales.
Medicamentos y autos sin control argentino
El plan oficial permite que productos aprobados por la FDA o fabricados bajo normas de EE.UU. ingresen sin inspección local. Esto significa ceder soberanía técnica y sanitaria. Nunca se explicó por qué se toma una decisión tan riesgosa.
Presión por la piratería y castigo a la economía popular
Estados Unidos exige cambios por el informe “Special 301”. Señala a la Argentina como un foco de piratería. Con ese argumento, el Gobierno quiere endurecer leyes y aumentar operativos en ferias populares como La Salada y el Once. Otra vez, se legisla para intereses extranjeros.
Un Congreso que no sabe qué va a votar
Las reformas más profundas quedarían para 2026. Ni los diputados libertarios conocen el contenido real del acuerdo. El Gobierno mantiene el texto en secreto y deja afuera del debate legislativo uno de los pactos más grandes de los últimos años.
Más productos estadounidenses y menos protección local
El Ejecutivo habilitará la entrada de carne aviar, lácteos, porcinos y bovinos de Estados Unidos. También simplificará registros para acelerar importaciones. Esto golpeará a productores argentinos que ya están en crisis.
Datos personales bajo normas de otro país
El Gobierno quiere reconocer a Estados Unidos como jurisdicción válida para manejar datos personales de argentinos. Es un cambio profundo que afecta la seguridad digital y la privacidad. Tampoco se explicó su impacto.
Un avance peligroso y sin controles
Milei avanza rápido, en silencio y sin mostrar el texto del acuerdo. Cambia leyes, entrega regulaciones y abre mercados sin informar a la sociedad. El país queda atado a reglas externas y sin defensa frente a futuros conflictos.