Tras su paso por Nueva York, el presidente Javier Milei prepara un regreso cargado de gestos y definiciones que podrían cambiar el rumbo electoral. La Libertad Avanza busca recuperar terreno en medio de encuestas ajustadas y un clima económico en ebullición.
El silencio de los últimos días llega a su fin. Luego de un viaje que lo mantuvo alejado del centro de la escena, Javier Milei regresa al país y con él renace la estrategia electoral de La Libertad Avanza. A menos de un mes de las elecciones generales, la campaña libertaria entra en una fase decisiva, marcada por la urgencia y la necesidad de reconquistar a un electorado cada vez más escéptico.
En los pasillos del oficialismo reconocen que la semana pasada fue crítica: el dólar se disparó, el riesgo país aumentó y la incertidumbre se apoderó de los mercados. “Si seguíamos así, nos estrellábamos”, admitió un dirigente cercano. La orden es clara: recuperar la iniciativa y volver a encender la épica que llevó a Milei a la cima del poder.
Las encuestas no ofrecen certezas. Algunas muestran una ventaja de apenas cuatro puntos sobre Fuerza Patria; otras, un empate técnico que alimenta la tensión. El gran interrogante es quiénes irán efectivamente a votar, un dato que puede torcer la elección. En varias provincias, la abstención empieza a ser un enemigo tan temido como la oposición.
Para contrarrestar ese escenario, Milei prepara una serie de apariciones relámpago en puntos estratégicos del mapa político. Rosario, Mar del Plata, Río Negro y Tierra del Fuego figuran entre los destinos posibles. El objetivo: mostrarse fuerte, rodeado de símbolos y con un relato que reavive la mística libertaria.
La maquinaria ya está en marcha. El fin de semana será clave: se espera que el presidente aterrice el viernes y retome la campaña desde el sábado con una agenda cargada. En paralelo, su equipo territorial —con Iñaki Gutiérrez a la cabeza— continúa recorriendo provincias para mantener encendida la llama de la militancia.
Con el reloj en contra y la tensión en aumento, el regreso de Milei promete sacudir la escena política. La pregunta que todos se hacen es si logrará recuperar el impulso perdido… o si la cuenta regresiva lo arrastrará a una elección más reñida de lo esperado.