El ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, mantiene el 99,9% de su dinero líquido fuera del país y desde que asumió en el gobierno de Javier Milei, su patrimonio se multiplicó por tres en dólares y por cinco en pesos. Así lo revela la Declaración Jurada que presentó recientemente y que expone una serie de movimientos financieros que reavivan la polémica sobre su rol como funcionario y sus intereses personales.
Según el documento oficial, Caputo declara un patrimonio de algo más de 9 millones de dólares, cifra que incluye propiedades, autos, embarcaciones, acciones y dinero en cuentas. Aunque inalcanzable para la mayoría de los argentinos, ese número resulta llamativamente bajo para quien es considerado por algunos como el “Messi de las finanzas”, especialmente teniendo en cuenta la evolución de sus activos desde que llegó al cargo.
La declaración muestra que el ministro conserva apenas el 0,04% de su dinero líquido en Argentina. En el país tiene poco menos de tres millones de pesos en depósitos y declara $87.273 en efectivo, una cifra que representa menos de la mitad de su sueldo como ministro. El grueso de su dinero, unos 4,5 millones de dólares, está en dos cuentas en moneda estadounidense en el exterior, aunque no detalla en qué país se encuentran. En declaraciones anteriores había admitido tener fondos en la Isla de Man, conocida por ser una guarida fiscal, pero esta vez solo menciona “depósitos en el exterior” sin más precisión.
Caputo también aumentó significativamente sus tenencias en empresas propias: duplicó el valor de sus acciones en la consultora Anker—que supuestamente había cerrado para dedicarse a la función pública—y multiplicó por casi 20 su participación en el fondo extranjero Ancora Investments, de nombre llamativamente similar. Además, vendió títulos públicos argentinos (AL29) y acciones de grandes compañías como Mercado Libre, Apple y Celanese Corp mientras ya ocupaba su cargo como ministro, lo que podría dar lugar a sospechas de uso de información privilegiada.
Otro dato llamativo es que Caputo figura con una deuda con su hermano Flavio, uno de los socios de Caputo Hermanos, firma vinculada al financiamiento del grupo ultraderechista Revolución Federal. También declara participación accionaria en Palmeral Chico y Sacha Rupaska, cuyos valores se multiplicaron por 4 y por 15 respectivamente desde su ingreso al gobierno.
El contraste entre su discurso público y sus movimientos financieros no pasó desapercibido. Años atrás, Caputo afirmaba que no hacía nada con sus ahorros porque si le salía bien lo acusarían de usar información privilegiada. Sin embargo, sus inversiones se multiplicaron desde que asumió como ministro. Lejos de confiar en el país al que pide ajuste y esfuerzo, mantiene su capital fuera del alcance de las políticas que él mismo diseña.
La falta de detalles sobre el destino de sus fondos en el exterior, sumada a las operaciones financieras realizadas desde que ocupa un rol clave en la economía nacional, reaviva las críticas sobre la transparencia y el verdadero compromiso del ministro con la Argentina.