Diego José Albornoz, quien asesinó a su ex pareja Soledad Andino tras haber sido liberado con una condena condicional por violencia de género, falleció en el Hospital San Martín de Paraná. Su muerte cierra una causa que generó indignación y cuestionamientos al sistema judicial de Victoria, Entre Ríos.
El pasado 13 de mayo, Diego José Albornoz ingresó por una ventana al domicilio de su ex pareja, Soledad Andino, en la ciudad entrerriana de Victoria, y la apuñaló mientras dormía. Una semana antes, había sido condenado a dos años y medio de prisión condicional por delitos de violencia de género, incluyendo lesiones, amenazas y desobediencia judicial. A pesar de las denuncias previas de Andino, la sentencia le permitió continuar en libertad.
Tras cometer el crimen, Albornoz se autolesionó y fue trasladado al Hospital San Martín de Paraná, donde permaneció internado en estado crítico bajo custodia policial. Falleció el 1 de junio debido a un shock séptico refractario con falla multiorgánica. Con su muerte, la causa será archivada al no haber otros imputados.
El femicidio de Soledad Andino generó una profunda conmoción en Victoria, una ciudad de aproximadamente 40 mil habitantes. Las autoridades locales suspendieron las actividades por el aniversario 215 de la fundación de la ciudad. El caso reavivo el debate sobre la eficacia de las medidas judiciales en casos de violencia de género y la necesidad de revisar los mecanismos de protección para las víctimas.