En plena polémica por los cambios en las listas de La Libertad Avanza, la Junta Nacional Electoral decidió no autorizar la reimpresión de afiches con la nueva composición electoral en la provincia de Buenos Aires, alegando razones de logística, plazos vencidos y riesgos para el proceso electoral.
La alianza oficialista había solicitado modificar los carteles que se exhibirán en los centros de votación para reflejar los nombres actualizados tras la renuncia de José Luis Espert y otros candidatos. El pedido incluía reimprimir miles de afiches con la nueva imagen de la nómina, con Diego Santilli o Karen Reichardt encabezando la lista.
Sin embargo, la Junta rechazó la solicitud argumentando que ya no hay margen material ni temporal para reabrir etapas cerradas, que los afiches ya han sido distribuidos y que cualquier alteración podría afectar la integridad del operativo electoral. Las fuerzas políticas opositoras también expresaron su rechazo, aduciendo que modificar la cartelería en esta instancia podría inducir a confusión, generar costos innecesarios e incluso poner en riesgo la transparencia del comicio.
El rechazo de esta petición es otro capítulo del fuerte enfrentamiento político que atraviesa el tramo final rumbo al 26 de octubre. En medio de la tensión electoral, cada decisión vinculada al cronograma, a la comunicación y al diseño del material de campaña adquiere una carga simbólica y práctica decisiva para el voto.
